El cuadro
Tomas era un joven artista, de unos 22 años, como todos el salía con sus amigos, tenía una novia que todos envidiaban, un bonito coche y un pequeño piso que pagaba con su amigo de la infancia Kevin. Tomás tenía una buena vida, no era perfecta, pero era muy buena...hasta que llegó una inesperada sorpresa al piso de los dos jóvenes.
¿Un cuadro?
Sí, es para ti, ¿no?
Yo no he comprado ningún cuadro, ¿para que voy a querer un cuadro? soy artista no coleccionista.
Pues en esta nota dice para Tomás Le da la nota.
Se habrán equivocado de Tomás, ¿no dice quien lo envía?
No...pero pone que fue comprado en el número 23 de Armín Mashulf
Lo mejor será devolverlo, ¿sabes donde esta esa calle? nunca había oído hablar de ella.
Ni idea tío pero...¿no tienes curiosidad por ver el cuadro?
Puede...pero podría romperse al sacarlo
Vamos, te servirá como ayuda para tus propios cuadros, quien sabe al igual es un Picasso
Ya claro, y que más
Ábrelo ya, gallina
No seas infantil
Agua fiestas
Tras una breve discusión Tomás se dispuso a devolver el cuadro, busco en Internet el nombre de dicha calle pero...
¿Qué demonios...? La calle del cuadro, no existe
Lástima...tendremos que abrirlo y ver si dentro hay algo más
Jaja, ni puta gracia Kevin
Pero Tomás sabía que tenía razón, así que poco a poco fue sacándolo de la caja y quitando el embalaje, al descubrirse el cuadro Tomas se asombró por la expresividad que este transmitía, tan bellos trazos, tan cálidos colores, tan hermoso paisaje...pero sobretodo la belleza de la mujer que se haya en él, ninguna otra mujer en todo el planeta podía compararse a ella, era perfecta en todos los sentidos.
Eh, tío ¿te encuentras bien? llevas un buen rato mirando el cuadro
Es...es perfecto, una obra de arte es...es...
¿Ahora te van las viejas?.
Gilipollas...no sabes apreciar lo que ves.
Tranqui tío, solo es un estúpido cuadro, no es para tanto.
Pero para Tomas si lo era, lo era tanto que no durmió en varias noches observando la belleza de la muchacha, Kevin preocupado por el, intentó hablar con él pero tras una discusión se llevo el cuadro a su cuarto y no salio de allí en cuatro días...en cuatro días nadie vió a Tomás hasta que Kevin y su novia, preocupados por el decidieron tomar medidas.
¿Tomas?. Cariño soy yo...Elli, ¿me abres la puerta? Se esperó unos segundos y entonces asistió a Kevin con la cabeza.
Kevin tiró la puerta abajo, en la habitación no había nadie, solo un cuadro donde aparecía un hombre anciano y en una esquina del cuadro ponía Tomás.
¿Un cuadro?
Sí, es para ti, ¿no?
Yo no he comprado ningún cuadro, ¿para que voy a querer un cuadro? soy artista no coleccionista.
Pues en esta nota dice para Tomás Le da la nota.
Se habrán equivocado de Tomás, ¿no dice quien lo envía?
No...pero pone que fue comprado en el número 23 de Armín Mashulf
Lo mejor será devolverlo, ¿sabes donde esta esa calle? nunca había oído hablar de ella.
Ni idea tío pero...¿no tienes curiosidad por ver el cuadro?
Puede...pero podría romperse al sacarlo
Vamos, te servirá como ayuda para tus propios cuadros, quien sabe al igual es un Picasso
Ya claro, y que más
Ábrelo ya, gallina
No seas infantil
Agua fiestas
Tras una breve discusión Tomás se dispuso a devolver el cuadro, busco en Internet el nombre de dicha calle pero...
¿Qué demonios...? La calle del cuadro, no existe
Lástima...tendremos que abrirlo y ver si dentro hay algo más
Jaja, ni puta gracia Kevin
Pero Tomás sabía que tenía razón, así que poco a poco fue sacándolo de la caja y quitando el embalaje, al descubrirse el cuadro Tomas se asombró por la expresividad que este transmitía, tan bellos trazos, tan cálidos colores, tan hermoso paisaje...pero sobretodo la belleza de la mujer que se haya en él, ninguna otra mujer en todo el planeta podía compararse a ella, era perfecta en todos los sentidos.
Eh, tío ¿te encuentras bien? llevas un buen rato mirando el cuadro
Es...es perfecto, una obra de arte es...es...
¿Ahora te van las viejas?.
Gilipollas...no sabes apreciar lo que ves.
Tranqui tío, solo es un estúpido cuadro, no es para tanto.
Pero para Tomas si lo era, lo era tanto que no durmió en varias noches observando la belleza de la muchacha, Kevin preocupado por el, intentó hablar con él pero tras una discusión se llevo el cuadro a su cuarto y no salio de allí en cuatro días...en cuatro días nadie vió a Tomás hasta que Kevin y su novia, preocupados por el decidieron tomar medidas.
¿Tomas?. Cariño soy yo...Elli, ¿me abres la puerta? Se esperó unos segundos y entonces asistió a Kevin con la cabeza.
Kevin tiró la puerta abajo, en la habitación no había nadie, solo un cuadro donde aparecía un hombre anciano y en una esquina del cuadro ponía Tomás.